lunes, 27 de enero de 2014

Yo no quiero más de lo mismo pero...

Yo tampoco quiero más de lo mismo. No quiero al que otrora fuera mi glorioso "Partido Liberación Nacional", cuatro años más haciendo estragos en nuestro país. No quiero que sigan robando descaradamente, no quiero que sigan teniendo tráfico de influencias, no quiero que sigan llevando a mi amada Costa Rica a la bancarrota. 

Yo no quiero más de lo mismo pero tampoco quiero irme al otro extremo. Mi abuelita Carmen me decía que los extremos son malos y yo le creía, le creía y le creo. 

Yo no quiero más de lo mismo pero tampoco quiero que se cambiemos "a la mama por una chancha." 

En otras palabras, estoy cansado del arroz con pollo (arroz con siempre) en todas las fiestas, pero eso no significa que quiera "arroz con Gecko" de ahora en adelante. Y que conste en actas que las mentadas lagartijitas chinas me gustan. Son plaga, pero no son tan refeas. 

Entonces si no quiero arroz con pollo, ni arroz con gecko, lo más sensato es buscar un arrocito que me pueda comer a gusto, que lo pueda digerir y que lo pueda costear como individuo. O sea, Marco, el arroz con langosta y/o camarones está fuera de su presupuesto. 

Veamos una propupesta más al centro, más equilibrada, más con un poquito de ambos, una propuesta que nos dejaría "con el santo y con la limosna." Una propuesta que quizá en cierta forma reuna lo mejor de cada experiencia, dándole el equilibrio necesario. 

No quiero más de lo mismo, pero el pseudo whatever siempre me ha caído mal. Les parecería buena idea que "el diablo repartiera escapularios", y que conste de nuevo en actas que no estoy satanizando a nadie, solo me pregunto: ¿Tendrán idea los partidarios de la izquierda en Costa Rica lo que es vivir en un país socialista, de izquierda o comunista? ¿Tendrán idea acerca de lo que significa no poder comprar lo que deseas o porque no podés o porque no te lo permiten? 

Algunos se preguntaran si quiero más de lo mismo; pero en serio que no, no quiero más de lo mismo. Voto, por quién a mi criterio, me ofrece la opción más balanceada, más equilibrada, más cercana a lo que siempre ha sido Costa Rica, más parecida a la idea que tenían los próceres que amaron a nuestro país. 

No les quiero imponer nada, solo les cuento qué es lo que me preocupa. Me preocupan y siempre me han preocupado los "pseudo" algos. Los pseudo religiosos, los pseudo demócratas, los pseudo comunistas, los pseudo cooperativistas, los pseudo servidores comunitarios, los pseudo maestros y profesores. 

Les recuerdo pensar en la diferencia entre "el ser y el deber ser". Piensen en eso a la hora de dar su voto. Cómo son los candidatos, cómo han sido y cómo deben ser. Aclaro que hay una enorme diferencia de significado entre el "deber ser" y el "debe de ser", el primero indica lo que se tiene que hacer, el segundo es una conjetura: Toc, toc, ¿Quién es? Ah, debe de ser algún candidato y debemos analizar si ese candidato DEBE SER, el presidente de la República de Costa Rica. 

¿Cómo deber ser el próximo presidente de nuestro país? 

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