Obras son amores y no buenas razones.

¿Qué es en realidad el sentimiento del logro? ¿Cuán necesario es ver los resultados a lo largo del camino hacia una meta específica? 

Durante muchos años fui entrenador de voleibol y siempre les decía a mis jugadores que algo muy importante era ir teniendo logros a lo largo del proceso "X" en que participábamos. En 1997 fuimos Campeones Nacionales Juveniles, pero ese fue solamente el logro final de esa etapa y el primer escalón de otra etapa que no se llegó a concretar (por falta de apoyo de las instituciones): Campeón de Juegos Nacionales. 

Volviendo al tema principal quiero retomar en mi vida y regalar a mis amigos y familiares, colaboradores y todas aquellas personas con las que de una u otra forma me relaciono en la vida diaria, en los negocios, en la amistad, en mi empresa, en mi familia, etcétera; dos palabras que tomé prestadas un día de otra disciplina deportiva: El ciclismo. Estas palabras son: Metas Volantes.

En la Vuelta Ciclística a Costa Rica, el objetivo mayor de todos los participantes es ganar la vuelta en su totalidad; pero cada día hay triunfos que aunque menores no dejan de ser al final importantes en la sumatoria total. Esos triunfos, son los que ellos llaman, o llamaban, no lo sé con exactitud: METAS VOLANTES. 

A lo largo del camino hacia la meta final o el objetivo mayor, (incluso de nuestras propias vidas) pasamos por y recogemos estas Metas Volantes, lo que pasa es que, estamos tan concentrados en esa meta final que no le tomamos el sabor, ni le damos el merecido respesto a las Metas Volantes y muchas veces las Metas Volantes son excelentes motivaciones para alcanzar con mayor facilidad la Meta Final. 

¿Estás notando y dándoles la atención y respeto que merecen a las Metas Volantes que vas consiguiendo? ¿Celebras esas Metas Volantes con pasión y vehemencia? ¿Estás incluyendo en tus planes de vida y de trabajo esas Metas Volantes desde el principio de tu planificación y estás anotándolas para darles el lugar que se merecen? ¿Estás haciendo de reconocimiento propio y público esas Metas Volantes? 

Te hago estas preguntas porque para la mayoría de las personas pasan desapercibidas y en el largo camino a la Meta Final, no tienen momentos de dulces y pequeñas victorias que ayudan a reconfortar el espíritu y a enardecer los deseos de llegar a la CIMA. 

Conozco muchas personas que NO reconocen y NO disfrutan de estas Metas Volantes. 

¿Hacemos un trato? ¿Te propones a estar más atento o atenta a estas Metas Volantes? ¿Las escribirías en un diario? Pueden ser varias veces al día, diarias, semanales, mensuales, anuales, etcétera; solo tienes que estar atento a estas alegrías que la vida te brinda. 

Bendiciones, salud y muchos éxitos.

Hablando sobre impuestos...

Hoy tuve una interesantísima conversación con mis dos estudiantes alemanas, una chica de 19 años quien aún no ha decidido que estudiar y una chica de 27 años, quien estudió Economía y se prepara para ir por su maestría en la misma rama. 

Estuvimos hablando sobre la enorme carga de impuestos que los alemanes tienen que pagar al gobierno de su país. ¿Me creerían ustedes que pagan aproximadamente 40 % de impuestos de su salario? ¿Y además que el gobierno quiere subir aún más esos impuestos y quizá llegar hasta un 50 %? 

Mis preguntas son las siguientes: ¿Cómo hacen los ciudadanos de la tercera economía del mundo para sobrevivir con una carga de 40 % de impuestos sobre el dinero que ganan? ¿Cómo hacen para poder guardar dinero y viajar durante semanas a otros países como el nuestro y trabajar en forma voluntaria ayudando a nuestras organizaciones? ¿Cómo hacen para tener productos más baratos que los que nosotros tenemos? 

En mi opinión, la respuesta es sencillísima: 

"Tienen menos gobernantes corruptos y menos ladrones en sus gobiernos". Fácil no. 

Como bien lo han acotado varios candidatos presidenciales de nuestro país, no es tanto que debamos subir los impuestos, sino que debemos ser más eficientes en la recaudación de los actuales y más estrictos a la hora de controlar las arcas del estado y dejar de permitir que algunos cuantos se roben el bienestar de muchos. 

Creo que es posible tener impuestos y pagar impuestos y vivir una vida decente y desarrollada, si tan solo logramos quitar a los ladrones y vividores que están en algunos puestos de gobierno. 

Los impuestos no hacen tanto daño como el tráfico de influencias, la corrupción, el clientilismo político, el nepotismo, la burocracia, la meritocracia y tantas otras enfermedades presentes en el estado costarricense.